Después de 24 horas de reflexión, he decidido escribir un correo a Javier en el que le digo que no, que no le voy a dar mi nº de teléfono, no sé, igual me paso de cautelosa pero prefiero que sea así.
Le he comentado que si su amigo Eduardo tiene interés en hablar conmigo que me envíe su nº de teléfono y yo me pondré en contacto con él.
Respecto a los personajes de la fotografía, la verdad es que están auténticos, son los típicos progres de la época, ellos con pelo largo, barba y algo desaliñados, ellas con pelos rizados, melena suelta, vestidos y faldas largas de flores.
La fotografía es en blanco y negro y está algo envejecida ya que en la imagen escaneada se advierten marcas de doblez.
Le he comentado que si su amigo Eduardo tiene interés en hablar conmigo que me envíe su nº de teléfono y yo me pondré en contacto con él.
Respecto a los personajes de la fotografía, la verdad es que están auténticos, son los típicos progres de la época, ellos con pelo largo, barba y algo desaliñados, ellas con pelos rizados, melena suelta, vestidos y faldas largas de flores.
La fotografía es en blanco y negro y está algo envejecida ya que en la imagen escaneada se advierten marcas de doblez.
En esta entrada creo que es oportuno comenzar con la descripción de Nicolás Macías Maeso que es así como le llamaré a partir de hoy y, no Justino porque al parecer ese es su verdadero nombre.
Es un Hombre de unos veinte años más o menos, moreno, el pelo casi le roza los hombros, es alto, con cara de niño y al agrandar la imagen con el zoom se puede apreciar unos ojos que miran fijamente a la cámara, es una mirada profunda y a la vez limpia como la de un chiquillo.
Nicolás es el que mejor indumentaria lleva o al menos la más formal. Viste pantalón vaquero, camisa clara y una chaqueta, alrededor del cuello luce una corbata a modo de bufanda medio caída.
Es bastante atractivo, tiene ese aire de romántico decadente que enamora.
Es un Hombre de unos veinte años más o menos, moreno, el pelo casi le roza los hombros, es alto, con cara de niño y al agrandar la imagen con el zoom se puede apreciar unos ojos que miran fijamente a la cámara, es una mirada profunda y a la vez limpia como la de un chiquillo.
Nicolás es el que mejor indumentaria lleva o al menos la más formal. Viste pantalón vaquero, camisa clara y una chaqueta, alrededor del cuello luce una corbata a modo de bufanda medio caída.
Es bastante atractivo, tiene ese aire de romántico decadente que enamora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario